El Cipotegato convierte a Tarazona en el epicentro de la fiesta

 Miles de personas han aclamado al  turiasonense Juan Ortega Sanz, de 33 años, que ha encarnado al popular personaje

Tarazona ya está de fiesta, y el encargado de dar el pistoletazo de salida ha sido el turiasonense Juan Ortega Sanz, de 33 años, que ha representado al Cipotegato 2017.

Puntual a su salida, a las 12.00 horas desde la Casa Consistorial, y bajo una intensa lluvia de tomates lanzados por los miles de personas que se han congregado, el Cipotegato ha completado veloz su carrera pese haber elegido un recorrido largo y duro.

Transcurridos 13 minutos, ha llegado a la plaza España y su ascenso al monolito en honor al Cipotegato ha desatado la euforia de los presentes que lo han recibido al grito de “¡Cipote, Cipote!

“Ha sido maravilloso, es un momento tan especial que es indescriptible, durante este año lo he imaginado muchas veces, pero la realidad supera los sueños”, ha explicado Ortega que llevaba diez años anhelando este momento. 

El Cipotegato ha vivido con mucha emoción su carrera con dos momentos muy especiales: uno en la iglesia de San Miguel como homenaje al sacerdote Jacinto fallecido recientemente, y otro en Los Laureles en la casa donde viven sus abuelos.

“No hay una manera mejor de arrancar las fiestas que con la salida del Cipotegato y la explosión que se produce a su llegada con una plaza abarrotada, congregando cada año a más gente”, ha señalado el alcalde de Tarazona, Luis María Beamonte.

El alcalde también ha expresado su deseo de que las fiestas transcurran con tranquilidad, civismo y alegría, y ha destacado la importante apuesta que se hace desde el Ayuntamiento para elaborar la programación de las fiestas con actos para todas las edades.

En este sentido, el concejal de Festejos, Julio Gracia, ha destacado la proyección exterior y la visibilidad de Tarazona con este evento que está declarado como Fiesta de Interés Turístico Nacional desde 2009.

Por delante, quedan seis intensos donde no faltarán los espectáculos musicales, el teatro, las actividades infantiles, los festejos taurinos populares o los actos más tradicionales como el homenaje al Cipotegato, la Ofrenda de Flores y Frutos y la Procesión de la Santa Reliquia de Santa Atilano.