• El curso estival que la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid ha celebrado esta semana en Tarazona resalta el papel histórico de la corona de Aragón en la articulación de la comunidad internacional panibérica y su proyección mediterránea.
De lunes a miércoles de esta semana se ha desarrollado el XVIII Curso de Verano Ciudad de Tarazona que la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid celebra cada año en dicha localidad, bajo la dirección de Ignacio Ruiz Rodríguez, catedrático de Historia del Derecho y de las Instituciones.
En esta edición el encuentro ha analizado la articulación de la Iberofonía, esto es, la reunión de los 850 millones de hablantes de español y portugués sin restricciones geográficas, con especial interés en las aportaciones de Aragón a tal comunidad. Para ello, se han congregado decenas de profesores, intelectuales, representantes institucionales y asistentes procedentes de diversos países de Europa, África y América. Entre ellos, el embajador de Cabo Verde en España, Ney Cardoso, o ponentes llegados desde la Universidad de Bolonia o la Freie Universität de Berlín.
A través de diversas disciplinas, los conferenciantes han debatido sobre los vínculos comunes del espacio iberófono y su proyección en el mundo actual. Así, han destacado el acervo cultural y lingüístico compartido como una base excepcional sobre la que articular una mayor y mejor cooperación internacional. En este sentido, los participantes resaltaron el papel de la corona de Aragón y su proyección mediterránea. De tal modo se pronunciaron, entre otros, Pablo Gonzalez Velasco, coordinador general de la plataforma mediática ibérica El Trapezio, y la historiadora Marina Perruca Gracia, oriunda de Calatayud y que este curso ha formado parte de la primera generación de mujeres admitidas en el centenario Real Colegio de España de Bolonia.
Además, el encuentro ha contado con una singular participación de la Fundación Universitaria Iberoamericana, entidad presente en más de treinta países, especialmente los de habla española y portuguesa, y de la Cátedra FUNIBER de Estudios Iberoamericanos y de la Iberofonía, participada por universidades de España, Angola, México, Puerto Rico y Colombia. Como representante de la Cátedra, intervino su director Frigdiano Álvaro Durántez Prados, profesor de la Universidad Europea del Atlántico de Santander (UNEATLANTICO) y antiguo asesor durante doce años de la Casa del Rey de España. Durántez ofreció la conferencia central del curso sobre la conceptualización teórica y el desarrollo institucional de la Iberofonía, cuestiones que impulsa desde los años noventa y de las que es considerado el principal experto y propulsor.
Asimismo, ejerció como secretario del encuentro Rafael Maldonado de Guevara y Delgado, también profesor de UNEATLANTICO y coordinador de la Cátedra. Maldonado disertó sobre Lope de Herrera, el primer diplomático enviado por los Reyes Católicos a Portugal para negociar la soberanía sobre América tras informar Cristóbal Colón del Descubrimiento en 1493. Herrera falleció diez años más tarde en Tarazona, a donde le había enviado el monarca Fernando para tratar asuntos de la corona de Aragón.